Mostrarse Vulnerable, signo de fortaleza
Razones por las que mostrar tu vulnerabilidad
En nuestro día a día y cada día más, vivimos situaciones que nos hacen sentir vulnerables. Estamos expuestos constantemente a circunstancias que no podemos controlar. Momentos de incertidumbre, situaciones difíciles, de riesgo y circunstancias en las que perdemos el control de lo que está sucediendo. En un instante sentimos debilidad ante las personas de nuestro entorno y ante la situación que debemos afrontar.
Este tipo de vivencias te hacen sentir inseguro y con miedo a afrontar la realidad.
Desconocer la respuesta a las preguntas que se nos plantean en nuestra vida, nos hace sentir mal. Cuando no sentimos ser suficiente antes los demás, la vergüenza nos invade y la necesidad de demostrar que tenemos respuesta para todo es más grande. Afloran los miedos al qué dirán, a no dar la talla e incluso a ser imperfectos. La necesidad de mostrarnos seguros ante los demás nos impide avanzar con naturalidad.
Sin embargo, mostrar tu vulnerabilidad significa ser tú mismo, descubrirte ante otros sin miedo al qué dirán, de forma auténtica. Como dice Brené Brown, “Para ser auténticos, debemos cultivar el coraje de ser imperfectos y vulnerables. Tenemos que creer que somos fundamentalmente dignos de amor y aceptación, tal como somos «.
Mostrar nuestra vulnerabilidad nos da la oportunidad de:
- Abrirnos y mostrarnos como somos, potenciando así nuestra autenticidad
- Ayudar a salir del control y a potenciar la capacidad de innovar.
- Abrir conversaciones valientes en las que compartir con creatividad
- Potenciar las relaciones con los demás Pedir ayuda, fortalece las relaciones y refuerza la confianza en ti mismo y en los demás.
- Ofrecer la oportunidad de reconocer y agradecer a los demás. Lo que redunda en crecimiento y desarrollo de las personas de nuestro entorno.
- Aprender y explorar nuevas perspectivas. Eliminamos barreras y abrimos nuevos caminos por los que avanzar.
- Nos capacita para ser resilientes y afrontar los cambios de forma natural.
Las situaciones de incertidumbre en las que nos vemos obligados a tomar riesgo y nos exponemos ante los demás, nos llevan a un proceso de aceptación.
- Aceptarnos tal como somos
- Aceptar que no lo sabemos todos y que debemos salir del control
- Aceptar la imperfección
- Hacer frente a la vergüenza y al miedo
Si miras en retrospectiva, puedes explorar qué es lo que te ayudó a vencer esa situación de debilidad. Piensa en tus experiencias vividas en las que afloró un sentimiento de inseguridad, tu vulnerabilidad, y las pudiste superar: una promoción inesperada, un viaje a un lugar desconocido, una decisión difícil, una pregunta sin respuesta por desconocimiento, un error cometido …
¿Qué cualidades estuvieron presentes que te permitieron avanzar?